Incendios Forestales

PATRICIA ABET SANTIAGO
El Ministerio de Interior alertó de que el riesgo de incendios forestales en Galicia sería «especialmente elevado» durante la jornada de ayer y el dato se confirmó a primera hora de la tarde. En el municipio orensano de Vilardevós se declaró el que, hasta la fecha, es el mayor fuego del verano registrado en la Comunidad. En una primera valoración «muy aproximada» el Gobierno gallego estimó que el fuego había afectado a unas 25 hectáreas de terreno, pero a las ocho de la tarde ya se habían alcanzado las 100 hectáreas. Al cierre de esta edició, la superficie calcinada llegaba a las 167 y los servicios de extinción habían logrado establecer un perímetro de seguridad que -salvo cambios violentos en la dirección o intensidad del viento- podría dar por controlado el incendio en torno a la medianoche.
Al lugar de los hechos se desplazaron cuatro motobombas, cuatro hidroaviones, cinco helicópteros de extinción y dos de coordinación y dos aviones con carga en tierra. Asimismo, fueron movilizados numerosos medios humanos, entre los que se contaban doce cuadrillas, siete agentes y cinco técnicos de la Xunta. El alcalde Vilardevós, José Luis Pérez García, informó de que las llamas llegaron a encontrarse a unos 200 metros de las viviendas del pueblo, aunque no hubo orden de desalojo. La cercanía del fuego provocó que entre los vecinos se vivieran momentos de tensión, al comprobar la velocidad con la que las llamaradas se estaban adentrando en el pueblo. La población, conformada por medio centenar de vecinos, colaboró con todas las armas que estaban a su disposición para impedir el avance, llegando a bombear el agua proveniente de un pozo municipal. Como consecuencia de las dimensiones del siniestro, la autovía A-52 sufrió múltiples retenciones y cortes de la circulación en alguno de sus carriles.
Horas antes del inicio del fuego, el conselleiro de Medio Rural -Samuel Juárez- se había referido a los 22 registros de incendios que se dieron el pasado domingo -de los que muchos se quedaron en simple conato- para resaltar que únicamente tres de ellos llegaron a quemar más de una hectárea de superficie. Durante su intervención, Juárez destacó la peligrosidad de las actuales condiciones climatológicas, al tiempo que mostró su confianza en que la media de fuegos mantuviese el mismo nivel bajo durante el resto de verano.
Los socialistas también tuvieron muy presentes las quemas forestales en una rueda de prensa que aprovecharon para acusar al PP de «enmascarar» los datos reales sobre la incidencia de los fuegos durante la época estival. Así, la portavoz parlamentaria de agricultura -Sonia Verdes- acusó al Ejecutivo autonómico de estar llevando a cabo una política de «oscurantismo» que estaría manipulando las estadísticas con la única finalidad de «lavar la cara al conselleiro de Medio Rural ante un dispositivo que sin duda es insuficiente y descoordinado». Verdes también exigió a dicha consellería que tome medidas para garantizar la seguridad y la respuesta efectiva frente a los fuegos y censuró que se estuviera «desmantelando» la central de coordinación contra incendios, a base de «recortar medios y despedir a la mayor parte de los profesionales informáticos del servicio».
El lapsus de Sonia Verdes
En un momento de su comparecencia, la socialista sufrió un lapsus al afirmar que durante la legislatura del Gobierno bipartito «no tuvimos que lamentar grandes incendios». Esta declaración desató la indignación en el bando popular, que no perdió tiempo a la hora de responder que «es de un cinismo político absoluto que se olviden las cuatro personas fallecidas y las cien mil hectáreas quemadas en 2006».
Desplome en Mesía
Samuel Juárez también se refirió al desplome de un tejado en una granja del municipio coruñés de Mesía, y que tuvo como consecuencia la muerte de más de 150 vacas. El conselleiro instó a las autoridades competentes a estudiar las causas del derrumbamiento y obligó a sacrificar los animales heridos. El popular también habló de su visita al Monte Pedroso -una de las zonas más afectadas por la ola de incendios de 2006- y señaló que la Xunta había realizado una «importante inversión» para su regeneración.

Ilha do Mel

Ilha do Mel es la porción de floresta atlántica mejor preservada de Brasil. Está localizada en el litoral sur de Paraná. A 95 kilómetros de Curitiba. Es una estación ecológica, reserva de la biosfera declarada Patrimonio de la Humanidad. El 90 por ciento del territorio es un área de preservación ambiental.

Tiene un total de 2.762 hectáreas, de las cuales 2.240,69 representan un área de estación ecológica; 28 kilómetros cuadrados de área verde y playas dulces. Posee innumerables playas de arena fina y blanca y un mar de aguas verdes y cristalinas. Las preferidas por los surfistas son las playas Grande y del Miguel. La playa de Fuera, de la Fortaleza y las de la región del faro son las más frecuentadas.

Es interesante visitar:
Las playas más recomendadas son: Praia do Fora y Praia das Bicas.
Playa de la Fortaleza Lugar donde se encuentra la Fortaleza de N.S de los Prazeres (1766). Todavía se observa armamentos de la época.
Playa del Farol de las Conchas Construido en 1872 era un antiguo depósito de mercaderías.
Playa Grande Lugar muy frecuentado por los surfistas.
Playa de Miguel Desierta, cercada de costas y vegetación nativa. Ideal para la práctica de ecoturismo.

De enero a marzo es cuando más gente visita Ilha do Mel por su clima subtropical, con un promedio de temperatura de 25 grados. Durante el resto del año la mayoría de los pocos bares y posadas que hay están cerrados.

En la isla no hay ni una sola casa de cambio y nadie quiere cambiar dinero (y si lo hacen te dan muy mal cambio). Lo más recomendable es cambiar antes de viajar a la isla. No se olvide del respeto al frágil ecosistema, y dele un destino correcto a la basura

Cómo llegar:
Debe tomar un barco que parte de Pontal del Sur, en dirección a la isla, a la playa de Nueva Brasilia (30 minutos), o a la Playa Encantada (25 minutos). El acceso a la isla es controlado por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Hídricos de Paraná. El número de visitantes que ingresan a la isla está restringido a no más de 5,000 personas.

El místico San Pedro de Atacama

Hablamos de un pueblo chileno que otorga su denominación a toda una zona, y está ubicado a unos 1.670 kilómetros de la capital del país, Santiago de Chile. La localidad más cercana es Calama, que a su vez integra el aeropuerto más próximo a este sitio, por donde llegan la mayoría de los turistas. San Pedro de Atacama se encuentra unos 2.450 metros por sobre el nivel del mar.

Considerada la capital arqueológica de Chile, San Pedro de Atacama conforma uno de los centros culturales más importantes de todo el país transandino. El lugar agrupa una gran cantidad de accidentes geográficos distintos que le otorgan una inmensa belleza natural, pues se encuentra rodeado de volcanes, géiseres, lagunas y minas de cobre.

Uno de los hoteles más importantes de la zona es el rústico Awasi, que ofrece varias modalidades de paseos que conducirán al turista al corazón del desierto. Además, en el centro de la ciudad se reúnen varias agencias de viaje que publicitan sus excursiones y visitas guiadas, con una buena gama de salidas tipo turismo-aventura, en circuitos totalmente off road.

La gran mayoría de las expediciones que se promueven comienzan por las mañanas, para tener un mejor aprovechamiento de las horas de sol, ya que la noche en el desierto es muy dura. Escogiendo una de ellas, el turista podrá deleitarse enseguida de la partida con los sorprendentes escenarios naturales. Con el avance por los arduos caminos, la presencia de los géiseres escupiendo vapor desde las profundidades del suelo conforma uno de los espectáculos más populares.

Tras 40 kilómetros de recorrido, se llega a la zona donde se encuentran los volcanes Licancabur y Lacar, que también ofrecen espectáculos visuales de inmensa belleza. Más adelante, se encuentra un pueblo de nombre Toconao, famoso por sus construcciones en piedra liparita. Luego se arribará a la zona de Quebrada de Jerez, donde se halla una especie de cañón, a través del cual corre un arroyo de agua dulce que regaba los huertos de los pobladores que estaban en el medio del desierto en la antigüedad.

El Valle de la Luna es un sitio espectacular, conformando uno de los anfiteatros naturales más asombrosos de todo el planeta, y a su frente se encuentra la sorprendente Cordillera de la Sal. Por si fuera poco, uno de los lugares considerados imperdibles se localiza en la zona de Tatio, que es un campo geotérmico ubicado a unos 4.200 metros de altura en la cordillera andina. Cerca de esos lugares se ubican las termas de Puritana, ideales para quienes quieran recuperar energías y gozar de un momento de relajación y paz, con sus pozos de agua termal a aproximadamente 30º centígrados.

Para la vuelta, el pueblo de San Pedro de Atacama brinda al viajante otros buenos sitios como su plaza principal, la Iglesia Mayor y el Museo Arqueológico Gustavo Le Paige. Este último posee más de 38.000 piezas arqueológicas que recuerdan y conservan los orígenes de la cultura chilena.

Las maravillas del Calafate

El Calafate es uno de los paisajes naturales más impresionantes del mundo, conformado por una serie de glaciares que desde que fueron descubiertos no pararon de atraer público, desde turistas hasta personas que lo eligieron como lugar de residencia. Esta zona fue declarada además como Parque Nacional para la conservación de su belleza, algo que lo dice todo en cuanto a su estética.

En sus comienzos, Calafate recibía turistas pero sin demasiada estructura de servicios para que éstos puedan disfrutar verdaderamente de su estadía. Algo que puede verse como algo negativo se convirtió en una de las principales riquezas de hoy en día para la ciudada: los habitantes recibían a los turistas brindando hospedaje en sus propias casas, lo que hizo que los reciban como verdaderos integrantes de su familia. Hoy en día, esto se mantiene: el increíble servicio que se ofrece está acompañado de una excelente atención y recibimiento por parte de la sociedad.

Ubicado en el departamento Lago Argentino, en la región de la Patagonia, Calafate pertenece a la Provincia de Santa Cruz. Es además, la localidad más cercana al Parque Nacional de los Glaciares.

Desde el Parque Nacional es de donde se realizan las excursiones a los glaciares. Las mayores atraccionec que pueden verse en dicho parque son el glaciar Perito Moreno, pero además hay una serie de actividades cercanas al turismo y al deporte aventura como el minitrekking y el Big Ice, excelentes actividades para los fanáticos del deporte y del turismo aventura.

El volcán Tupungato

En voz de los huarpes o Warpes, etnia indígena de Cuyo, de los cuales en la actualidad hay 11 comunidades en la provincia de Mendoza, Tupungato significa “mirador de estrellas”. Quizá deba su nombre porque este volcán al sur del Aconcagua, es la montaña más alta de la cordillera de los Andes.

Ubicado en la frontera de Chile y la Provincia de Mendoza en la República de Argentina, este volcán de tipo cónico compuesto de capas de lava endurecida y cenizas volcánicas, es uno de los volcanes más altos de Sudamérica con 6550 metros sobre el nivel del mar.

Si bien desde el punto de vista geológico es un volcán extinto, el Tupungatito, al suroeste del primero y con una altura un poco menor con 5.913 msnm, sí se encuentra en estado de actividad aunque algunas de ellas registradas desde 1829 no fueron más que suaves emisiones de ceniza.

Visible desde la capital de Chile, sobre todo al sur sobre el puente Maipo y desde los valles ubicados al centro-norte de la Provincia de Mendoza, esta enorme montaña se impone grandiosa por su altura sobre la cordillera.

Para aquellos intrépidos interesados en el montañismo, el Tupungato puede ser una buena opción para las próximas vacaciones. Si bien para los entendidos en este deporte, es técnicamente sencillo su asenso, es tan duro como el Aconcagua y los últimos metros hasta la cima tienen una especie de caparazón de hielo perenne que dificulta la llegada. Tres rutas (Norte, Oeste y Sur) de igual distancia y dificultad son las que te aproximan al lugar.

El 12 de abril de 1897 en la expedición Fitz Gerald, los suizos Matthias Zurbriggen y Stuart Vines fueron los primeros hombres en ascender la montaña, por lo menos de los que se tiene registro. El primero de los hombres, Matthias, unos pocos meses antes había escalado el Aconcagua, a 80 kilómetros al norte del Tupungato.

Las Cataratas Del Iguazu

Compartidas por Argentina, Brasil y Paraguay, las Cataratas del Iguazú, o en guaraní de cuyo nombre deriva “Y- Guazú”, son un increíble espectáculo natural que deberías visitar alguna vez. Puedes hacerlo ingresando por la ciudad Puerto de Iguazú, Argentina, por Foz do Iguacu, Brasil o desde la ciudad del Este en Paraguay.

Descubiertas en 1541 por el conocido conquistador Alvar Núñez Cabeza de Vaca, estas Cataratas “Aguas Grandes” en su traducción al español, son parte del Patrimonio Natural de la Humanidad nombradas por la UNESCO.

Cada año son visitadas por cientos de turistas, mayoritariamente en los meses de verano y provenientes en general de todas partes del mundo, y en particular por uruguayos, y brasileños y argentinos de las diferentes regiones.

Las mismas nacen al sur de Brasil, en la zona de Sierra Do Mar, en el río Iguazú, de allí su nombre, el cual mide en total cerca de mil trescientos klómetros. Pero las cataratas se conforman en la confluencia de este río con el río Paraná, donde varias islas al dividir la corriente de agua, generan más de 270 cascadas, con una altura aproximada de 82 metros y 4 kilómetros de ancho. Imagina el sonido de toda esa cantidad de agua cayendo desde esa altura, que increíble paisaje visual y sonoro.

Los suelos de esta zona, se caracterizan por tener un color rojizo como el del ladrillo. Esto es debido a la presencia del mineral laterita y al clima subtropical, que hace que este elemento se oxide y de este color tan particular.

Cada salto tiene su nombre, y cuenta con una belleza especial, sin embargo los saltos más conocidos son Dos Hermanas, San Martín, Rivadavia, Adán y Eva, entre otros, pero sin lugar a dudas el más famoso por su grandeza y potencia, es La Garganta del Diablo, que a su vez constituye la marca divisoria entre Brasil y Argentina.